miércoles, 26 de diciembre de 2007

Devolución Patrimonio Histórico de la CNT




El Consejo de Ministros aprobó este viernes la devolución del patrimonio sindical histórico, incautado durante el franquismo, a la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) y a Eusko Langileen Alkartasuna (ELA). El Gobierno mantiene que con estos acuerdos se ha resuelto el 99,6% de las reclamaciones presentadas y, por ello, 'se puede afirmar que la devolución del patrimonio sindical histórico está concluida'.

El Ministerio de Trabajo señala que la compensación a la CNT resuelve prácticamente la totalidad de las solicitudes pendientes. La central anarcosindicalista presentó 5.191 expedientes de los que se desestimaron 4.652 y se admitieron 386. Quedan pendientes de resolución para el próximo año 34. El importe reintegrado a este sindicato alcanza los 7.364.221,64 euros. En cuanto a ELA, han quedado solucionadas las 192 solicitudes entregadas. La indemnización supone 761.287,51 euros.

El Gobierno aprobó en octubre de 2005 un real decreto que modificó la Ley de Cesión de Bienes del Patrimonio Sindical, de 1986, y establecía un periodo para la presentación de demandas. El plazo terminó el 31 de enero de 2006.

Tras UGT

El texto fue elaborado por el equipo encargado de 'La recuperación de la memoria histórica', dirigido por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. Su objetivo principal era enmendar una Ley que tenía una antigüedad de 20 años, en la que se observaban dificultades en su ámbito de aplicación. .

El primer beneficiario del real decreto fue UGT. En noviembre de 2006, el Ejecutivo dio el visto bueno para que le fueran devueltos a la central socialista 149,4 millones de euros y la titularidad de 26 inmuebles. El dinero fue destinado a saldar la deuda de 151 millones de euros que UGT mantenía con el Instituto de Crédito Oficial (ICO) por el conflicto de la cooperativa de viviendas PSV.

Las devoluciones de este viernes y la última entrega realizada a UGT completan otras llevadas a cabo en 1986, por el gobierno socialista de Felipe González. Entonces los importes ascendieron a 25 millones de euros y a 1,5 millones (pagados en pesetas) y los destinatarios fueron la central socialista y la CNT.