martes, 25 de marzo de 2008

Biografías: Gregorio Jover Cortés

Dirigente anarcosindicalista, amigo personal de Buenaventura Durruti, que durante la dictadura del general Primo de Rivera tuvo una destacadísima actuación al enfrentarse, en muchas ocasiones, con los pistoleros de los llamados Sindicatos Libres, y que durante la guerra civil asumió el mando de diversas unidades de milicias confederales que se alinearon junto a las fuerzas leales a la República, con las cuales combatió en diversos teatros de guerra. Mandó la 28 división y se exilio a Méjico.

¿ Qué fueron los sindicatos libres ?

Sindicatos Libres, en catalán Sindicats Lliures o Unió de Sindicats Lliures, fue una organización creada por militantes carlistas en el Ateneo Legitimista en 1919, bajo el auspicio de la Patronal Catalana y vinculados ambos a la autoridad militar de Cataluña (el general Severiano Martínez Anido, el comandante Bartolomé Roselló y el capitán Lasarte, entre otros, bajo las órdenes de la Capitanía General de Cataluña, comandada por el general Milans del Bosch).

Los Sindicatos Libres fueron dirigidos por el requeté Ramon Sales, natural de La Fuliola, como presidente. Su ideólogo fue Juan Laguía Lliteras, quien también fue secretario general, acompañados de Josep Baró, Jordi Bru, Estanislao Rico, Domingo Farré, Feliciano Baratech y Mariano Puyuelo. Los miembros de los Sindicatos Libres fueron el brazo ejectutor de los atentados y asesinatos de miembros prominentes de la CNT como Salvador Seguí, y también del abogado Francesc Layret. Tuvo escaso apoyo dentro del mundo obrero, pero recibieron apoyo por parte de la dictadura de Primo de Rivera.

En 1924, al ser prohibida la CNT, atrajo a sindicatos independientes y también a algunos sectores propensos a la izquierda. En enero de 1924 se fusionó en Pamplona con los Sindicatos Católico-Libres de los dominicos José Gafo y Pedro Gerard, constituyendo la Confederación Nacional de Sindicatos Libres de España. Aun cuando en 1929 proclamaban tener 190.000 afiliados, no se consolidaron como fuerza sindical y no consiguieron sobrevivir a la proclamación de la Segunda República.