jueves, 11 de junio de 2009

No amputes la mano que te da de comer... FASCISTA !!!


Un empresario abandona en la calle a un trabajador ilegal tras amputarse el brazo.
Nativa o extranjera, la misma clase obrera!! Panificadora Rovira Boicot !!
Demuestrales tu desprecio.

Un trabajador inmigrante de 33 años, que perdió el brazo izquierdo con una máquina de amasar en la 'panificadora Rovira' del polígono Real de Gandia, C/Sant Antoni, nº 6 (Valencia) Tel: 96-287.54.91, el pasado 28 de mayo, ha denunciado que fue abandonado por su jefe unos 50 m antes de llegar al hospital porque carecía de contrato de trabajo y no estaba dado de alta en la Seguridad Social. Tras tomarles declaración, la Guardia Civil dejó en libertad a los dos superiores del empleado.
El joven, de origen boliviano, que afirmó encontrarse "bien" y sin "miedo" a su jefe, llevaba trabajando en este empresa de Gandia algo más de un año y medio, sin contrato de trabajo, al igual que el resto de los compañeros, según ha denunciado ahora su hermana Silvia.
Cobraba 700 € al mes por 12 horas diarias, la mayoría en turno de noche. En el momento del accidente, el joven intentaba "hacer su faena, como todos los días".
El joven, se encontraba amasando 40 kg de harina y, cuando se le cayó una bolsa, se le quedó enganchado el brazo izquierdo en la máquina, "perdió el brazo, pero la máquina podía haberle tragado si no la hubiera apagado".
Abandonado de camino al hospital
Tras el incidente, el jefe del joven lo subió a su vehículo y le trasladó al hospital San Francisco de Borja de Gandia, aunque unos 50 m antes de llegar, le obligó a bajar y lo abandonó en la calle, "mientras perdía mucha sangre". La hermana ha asegurado que el empresario se comportó de esta manera porque "no tenía permisos ni licencias" y, además, "tenía a sus trabajadores sin contrato, sin papeles".
Un viandante fue el que ayudó al joven a llegar al servicio de Urgencias del Hospital de Gandia. Una vez allí, los médicos se pusieron en contacto con el cirujano Pedro Cavadas y su equipo para ver si le podían reimplantar el brazo. Los facultativos trasladaron al joven hasta el Hospital Virgen del Consuelo de Valencia pero no se pudo hacer nada porque el brazo "se encontraba en muy mal estado, ya que los empresarios, tras lo ocurrido, lo tiraron a un contenedor".
Los dueños de la panadería industrial Rovira "limpiaron todo para no dejar restos de nada".