sábado, 20 de marzo de 2010

Extranjeros CNT-FAI:François-Charles Carpentier


El 28 de octubre de 1904 nace en Reims (Francia) el militante anarquista y combatiente de la Revolución española François-Charles Carpentier. En enero de 1915, encontrándose en zona ocupada, es deportado con su padre, militante libertario, a un campo de concentración en Alemania, siendo repatriado por la Cruz Roja por ser un niño. A cargo de un tío, primero trabajará en diversos talleres de texturas y cuando su padre recobró la libertad trabajó con este desenterrando obuses y volviendo a tapar las trincheras.

Hacia 1920 encontró trabajo en la mina de Bruay-en-Artois y posteriormente hace de descargador del muelle de Ruán. En 1924, instalado en París, trabaja en varias pequeñas ocupaciones en el mercado de les Halles y empieza a frecuentar los círculos anarquistas. El 10 de noviembre de 1924 fue incorporado al Regimiento de Tiradores y enviado al sur de Marruecos para combatir la rebelión de Abd el-Krim. Licenciado el 10 de mayo de 1926 con el grado de Cabo de Ametralladoras, se instaló en París, donde hizo varios trabajillos. A comienzos de 1928, domiciliado en el suburbio parisino de Aubervilliers, trabajó como repartidor de carbón.

Secretario del grupo anarquista de Saint-Denins, en 1930 conoció al militante anarquista Charles Ridel, con quien permanecerá ligado de por vida en una fuerte amistad. Delegado del grupo de Saint-Denis en el congreso de la Federación Anarquista parisina del 4 de junio de 1933, fue elegido secretario adjunto de la organización junto a Le Bott. Entre el 14 y el 16 de julio de ese año participó como delegado de Saint-Denis en el congreso de la Unión Anarquista Comunista Revolucionaria en Orleans. En febrero de 1934, a raíz de los disturbios fascistas, pasó la noche del 11 defendiendo revólver en mano la Bolsa del Trabajo con Mercier Vega. Durante el Frente Popular ambos apoyaron Simone Weil durante la huelga de la fábrica «Sauter et Harlé». En esta época hizo de tesorero de la Federación Comunista Libertaria, de la que también eran miembros Nicolas Faucier y Mercier Vega, y que luego se fusionaría con la Unión Anarquista.

En 1936, con Mercier Vega y otros, parten hacia la Revolución española y fundan el Grupo Internacional de la Columna Durruti, que afrontará duras batallas en el frente de Aragón. Después de la batalla de Perdiguera, donde el Grupo Internacional de la Columna Durruti será diezmado, Mercier y Carpentier volverán a Francia para organizar la solidaridad. A finales de 1936 Carpentier volverá a Barcelona como delegado de la Unión Anarquista ante la Federación Anarquista Ibérica (FAI). Aprovechará la coyuntura para enviar varios artículos sobre la Revolución española para Le Libertaire. Durante un gran mitin celebrado para celebrar la entrada de 1937, con Scolari y Balart, rechazarán cantar La Internacional con los comunistas.

Gracias a Berta Ascaso, fue alojado en una casa socializada en Barcelona con su compañera que había viajado a la península con un convoy de camiones de solidaridad organizado por Pierre Odéon. En esta época conoció al militante anarquista italiano Ernesto Bonomini quien, el 20 de febrero de 1924, había ajusticiado a Nicola Bonservizi, representante personal de Mussolini en París. En mayo de 1937, en Barcelona, Carpentier se batirá contra los comunistas que intentan destruir a los anarquistas y a los militantes del POUM, instalando una ametralladora en la azotea de la fábrica de jabón Myrurgia, cerca de la Sagrada Familia, y también participó desde un automóvil blindado en el ametrallamiento del local de Estado Catalán. Algunos meses después volverá a Francia huyendo de los estalinistas, completamente desilusionado del fin de la revolución, pero todavía recaudaron armas y las llevó clandestinamente a Barcelona. Los 29 y 30 de octubre de 1937 participó en el congreso de la Unión Anarquista y con Mercier dejará la organización.

En 1938 colaboró, con Lucien Feuillade, Mercier Vega y Nicolas Lazarevitx en la revista de estudios revolucionarios Révision. Movilizado en 1939, su regimiento fue rodeado por las tropas alemanas, pero pudo escapar. Con la Liberación dejó toda militancia - fue eliminado de la lista de anarquistas a vigilar el 31 de agosto de 1948 -, pero continuó en contacto con los viejos militantes (Mercier Vega, Feuillade) y montó una pequeña empresa de transporte. Durante los años ochenta relató su experiencia revolucionaria en España a varios jóvenes historiadores (David Berry, Phil casos). François-Charles Carpentier murió de cáncer el 21 de marzo de 1988.