viernes, 10 de septiembre de 2010

En picado


Según los datos de afiliación a las centrales del Ministerio de Trabajo, 276.086 empleados dejaron de pertenecer a las organizaciones CC.OO y UGT en un año. Si en 2008 sólo el 17,4% de los ocupados estaba afiliado a estos "sindicatos" algo menos de 3,5 millones de afiliados, el pasado ejercicio este índice cayó al 17,2% algo más de 3,2 millones.

El desplome ha sido mayor entre los trabajadores jóvenes. Casi 150.000 ocupados de entre 16 y 29 años se dieron de baja en estos "sindicatos" verticales el pasado año. Además, tan sólo el 10,9% de los empleados de entre 25 y 29 años están apuntados a UGT y CCOO frente al 12,2% de 2007, lo cual pone en serios aprietos el relevo generacional de las afiliaciones sindicales. Esta exigua cifra contrasta con la afiliación sindical de los trabajadores con más de 45 años, que asciende al 23,7%, mientras que en el caso de los mayores de 55 años se sitúa en una tasa del 20,1%.

Pese a todo, los "sindicatos" como CGT, UGT, USO, CC.OO., CAT, LAB, CSIF, SAT, etc, etc,...cuentan las elevadísimas subvenciones y ayudas públicas que les otorga el Gobierno, sin contar con innumerables privilegios y beneficios financiados vía impuestos, con lo que este desplome en las afiliaciones apenas tendrá repercusión en sus cuentas internas. Pese a su escasa representatividad ,- nunca la tuvieron- estas organizaciones vendeobreros regularon las condiciones laborales de 10,3 millones de empleados en 2009 ¡¡el 60% de los trabajadores!!.

La CNT-AIT es, hoy por hoy, el único sindicato en el Estado español totalmente independiente de directrices políticas, en el que los que deciden son los trabajadores afiliados y no un comité de profesionales del sindicalismo; que renuncia a la financiación del Estado y la Patronal para mantener su independencia económica, y que no deja las negociaciones en manos de intermediarios.