sábado, 27 de octubre de 2012

En casa del herrero cuchillo de palo: UGT y CCOO aplican EREs

La última reforma laboral ha disparado la cifra de expedientes de regulación de empleo (ERE) en las empresas. Pero no solo en las medianas y grandes compañías, las dos centrales sindicales de este país, que claman contra esta modificación legislativa que abarató el despido -entre otros efectos colaterales- también está aplicando esta medicina a sus plantillas. En Cádiz, los trabajadores de UGT tienen encima de la mesa el mismo futuro incierto que los miles de afectados por regulaciones laborales masivas. Pero con una clara diferencia: enfrente, como patronal, tienen al sindicato, quien a la hora de adelgazar su estructura no duda en agarrarse al mismo texto legal contra el que piden a la ciudadanía que se movilice.
Fuentes internas de UGT confirmaron  que la central sindical planea aplicar un ERE que afectaría a unas quince personas. Si bien, se está sondeando a los trabajadores por si aceptarían otras alternativas que no supusieran el despido definitivo como un expediente temporal (ERTE). Los empleados que se acogieran a esa regulación definida en el tiempo verían reducida la jornada a la mitad y, por ende, el salario. Las mismas fuentes señalaron que la mayoría de estos trabajadores no llegarían ni a los 600 euros mensuales.
UGT, al igual que CCOO, han visto seriamente reducidas las inyecciones de dinero público; lo que ha tenido un efecto directo en los ingresos que manejan las centrales. Tampoco corren buenos tiempos para la afiliación, la otra vía de ingresos que tienen estas organizaciones. Con el aumento brutal y constante del desempleo, las afiliaciones están en caída libre. De ahí que hayan sacado las tijeras en algunas comunidades autónomas. En el caso de UGT, desde que se aprobara la reforma laboral, se han presentado expedientes en Madrid, Castilla La Mancha, Cantabria, La Rioja y Canarias, que han supuesto la salida de más de un centenar de trabajadores.